El club necesita dinero y espera cerrar en unas horas el traspaso del cántabro a la Real Sociedad | El argentino, cerca de llegar a un acuerdo con el Atlético de Madrid para jugar cedido en el Calderón hasta el mes de junio
LASPROVINCIAS.ES , JUAN CARLOS VILLENA | VALENCIA.-
La mañana en la ciudad deportiva de Paterna ha sido frenética. Y el entrenamiento del Valencia no ha sido lo noticia más importante, un dato que deja bien claro en el caldo del cultivo en la que se mueve el club en los últimos días del mercado de invierno. En el intervalo de quince minutos la entidad ha anunciado el fichaje de Keita y la lista de convocados para el partido ante el Barcelona que nunca se ha desvelado a más de 48 horas para que comience un partido.
El motivo ha sido dejar claro que Banega y Canales, que no han entrado en la misma donde sí aparecen Portu y Robert Ibáñez, están en la rampa de salida para una posible venta en las próximas horas. El cántabro está a un paso de cerrar su fichaje por la Real Sociedad, mientras que el argentino podría salir cedido al Atlético de Madrid. Sería la segunda vez que Banega juega en calidad de cedido en el conjunto rojiblanco. Simeone le quiere y el argentino estaría en el Vicente Calderón hasta junio.
La lista anunciada para Barcelona, donde las gran novedad es la entrada de Eduardo Vargas, podría sufrir modificaciones antes de mañana a las cuatro. La plantilla comerá en Paterna tras el entrenamiento y se desplazará a la ciudad condal en el autobús oficial del equipo.
Tras la sesión de hoy, donde Pizzi ha incidido en los movimientos defensivos para intentar parar mañana al equipo del Tata Martino, Oriol Romeu no ha tenido problemas para opinar en el sentido contrario que su compañero Mathieu, que ayer calificó la temporada "de transición". "No lo veo así, nos gustaría estar más arriba y luchar por los puestos de Europa pero ahora lo que tenemos es que ganar partidos y jugar bien al fútbol. No tenemos que pensar en el sexto puesto sino en mejorar cada día, si vamos subiendo lucharemos hasta el final. Acaba de empezar la segunda vuelta, quedan muchos partidos y no nos damos por vencidos".
El catalán ha dejado claro que le gustaría que Canales y Banega no salieran del equipo "aunque no se cuál ha sido el motivo por el que se han quedado fuera de la convocatoria. Ya veremos cómo acaba la cosa, me gustaría que se quedaran porque con Sergio tengo una gran relación y Éver ha demostrado lo que es capaz de hacer. No sabemos qué es lo que pasa por sus cabezas y que es lo que piensan. Ojalá se queden muchos años pero ellos decidirán y harán lo que vean oportuno".
Para terminar, el mediocentro ha confesado que no está preocupado por la llegada de Keita "porque toda incorporación es buena para el equipo y no me preocupa que jugue en mi sitio o más adelante" y que, al contrario que Mathieu, tampoco ve que hayan compañeros que estén con la mente en otra parte: "La verdad es que no lo veo. Los que vamos convocados a Barcelona estamos concentrados, no veo a ninguno que esté pensando en otras historias o en fichajes. Todos queremos colaborar".
Canales, a un paso de la Real Sociedad
Sergio Canales tiene pie y medio en la Real Sociedad. Según ha podido saber LAS PROVINCIAS, es cuestión de horas que se confirme el traspaso del futbolista cántabro al club de San Sebastián. Ayer el entorno del jugador ya se debatía en las primeras dudas, puesto que el cántabro pensaba que los equipos que ofertarían para hacerse con sus servicios serían de un escalón superior a la Real Sociedad y el Villarreal. El Valencia, y más teniendo en cuenta lo ocurrido no hace mucho con Bruno Soriano, no venderá a la baja a Canales al equipo de Fernando Roig. Pero sí ha escuchado la ofensiva final del conjunto vasco, que Rufete tiene claro que se producirá hoy.
Fuentes de la entidad valencianista confirmaron ayer que la operación de venta de Canales, además de atender a un deseo del jugador, responde a las necesidades económicas. «El club necesita hacer caja», esa fue la frase pronunciada por una de las voces más autorizadas en el escalafón blanquinegro. Las operaciones de Postiga y Pabón sí que se han realizado teniendo en cuenta a sus sustitutos (Vargas en el caso del colombiano y el delantero que está intentando atar Rufete para paliar la salida del portugués). Pero si finalmente el cántabro deja la disciplina valencianista antes de mañana a las doce de la noche no vendrá un sustituto. La operación, al menos hasta verano, sería tan sólo económica.
La decisión de escuchar ofertas a la baja, que no significa aceptar, está sustentada por varias cifras que rodean a la 'operación Canales'. El Valencia acordó un traspaso con el Real Madrid de 8,5 millones de los cuales están pendientes de pago 4,5. Dos de ellos, de un millón cada uno y que tendrán que ser efectivos el 15 de enero y el 15 de junio, corresponden al ejercicio 2014. Por tanto toda oferta que supere esos 4,5 equilibraría la deuda que el club tiene con el conjunto blanco con respecto al traspaso del jugador.
En segundo lugar está la ficha del futbolista. El compromiso de pago que el Valencia, sumando el salario, la prima de contrato, los derechos de imagen y el premio individual estipulado en el acuerdo con el futbolista si siguiera siendo valencianista a 31 de junio de 2015, asciende a algo más de 6 millones de euros en las tres temporadas y media que le restan de contrato. Una cifra muy superior a la que cobraría su posible sustituto, con Carles Gil en el horizonte y la posible vuelta del cedido Viera.
La tercera acepción de la necesidad de hacer caja recuerda el pasado más reciente del Valencia. Para cuadrar el pasado ejercicio la entidad entonces presidida por Manuel Llorente pospuso el pago de 6,7 millones correspondientes a las fichas de febrero de 2013, para hacerlas efectivas en pagarés que fueron cobrados por los futbolistas en diciembre. La operación contable, que desvió esos casi siete millones de euros al actual presupuesto, también conllevaron unos gastos financieros de 293.000 euros a la entidad de Mestalla.
Postiga, a la Lazio; Banega y Vezo, con muchas opciones de salir
El Valencia cerró a última hora de ayer el acuerdo con la Lazio para la cesión de Postiga. Cuando los médicos del conjunto romano den su visto bueno (el portugués no se ha entrenado en la última semana por una lumbalgia), se firmará un documento por el que el conjunto italiano no pagará ningún dinero, se hará cargo de la totalidad de la ficha de Postiga hasta junio y se fija una opción de compra de 3,5 millones. El ariete le costó al Valencia 3,2 en verano, vino como sustituto de Valdez y ha marcado cuatro goles. También se ha hecho oficial la cesión de Andrés Guardado al Bayer Leverkusen alemán hasta el mes de junio.
Banega y Vezo también seguirán en vilo el cierre del mercado. Rufete y Salvo siguen esperando por el argentino ofertas que superen los diez millones de euros. Ayer, al finalizar el entrenamiento, Pizzi se quedó charlando durante más de diez minutos con Banega en una escena de fútbol en estado puro, con los dos interlocutores sentados encima de un balón.
Por otra parte, el Valencia está en busca de un delantero centro. La primera opción de la secretaría técnica es el ítalo-argentino Osvaldo. El problema es que la Juventus se ha lanzado a por el delantero -actualmente en las filas del Southampton, pero apartado por problemas disciplinarios- para acompañar a Fernando Llorente y Carlos Tévez en el ataque de la 'Vecchia Signora'.
La otra opción que manejan los técnicos es la Vucinic, precisamente en la rampa de salida de la Juventus si finalmente contratan a Osvaldo y cuyo fichaje ha cogido fuerza en las últimas horas.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario