Así es imposible creer. Tener fe, ilusión, darlo todo por el equipo, eso es lo que el club pide a sus aficionados. Y los aficionados SIEMPRE cumplen. Jamás fallan. Pero luego, el equipo no le corresponde sobre el césped. Ante uno de los peores Barcelonas de la historia reciente, incapaz de cerrar los partidos (gracias, entre otros, a las grandes paradas de Alves, el mejor del Valencia) y con unos delanteros con la puntería desviada, el Valencia apenas inquietó un par de veces la portería de Pinto. La mejor noticia de la noche, por desgracia, es mirar el marcador y comprobar que, como mal menor, el VCF no se llevó una goleada escandalosa.
La clave del partido: La falta de acierto del Barça y el buen partido de Alves bajo palos. Al final, se puede analizar de muchas formas, pero la cruda realidad es la que es. el Barça, con más puntería, te hubiese metido un carro. Y aún así, la Diosa Fortuna quiso que el VCF estuviese metido en la eliminatoria hasta los últimos quince minutos, aunque no había hecho méritos para merecerlo. El gol de Xavi sentenció.
El mejor: Jordi Alba, el que más ganas le puso. Y Alves, con el (enorme) borrón del 1-0, estuvo impresionante bajo palos. Lo detuvo casi todo.
El peor: La lista es larguísima. El partido de Víctor Ruíz y de Rami sólo puede calificarse de infame, y creemos que estamos siendo demasiado generosos. Banega desaparecido (curiosamente, desde que renovó no ha hecho un partido bueno), Miguel desbordado, Aduriz aislado... Una lágrima.
El detalle: Mil valencianistas acudieron al Camp Nou a animar a su equipo. El regreso en autobús será un trago amarguísimo con el que nos solidarizamos plenamente.
http://444gramos.com/valencia/2-0-barcelona-valencia-asi-es-imposible-creer
La clave del partido: La falta de acierto del Barça y el buen partido de Alves bajo palos. Al final, se puede analizar de muchas formas, pero la cruda realidad es la que es. el Barça, con más puntería, te hubiese metido un carro. Y aún así, la Diosa Fortuna quiso que el VCF estuviese metido en la eliminatoria hasta los últimos quince minutos, aunque no había hecho méritos para merecerlo. El gol de Xavi sentenció.
El mejor: Jordi Alba, el que más ganas le puso. Y Alves, con el (enorme) borrón del 1-0, estuvo impresionante bajo palos. Lo detuvo casi todo.
El peor: La lista es larguísima. El partido de Víctor Ruíz y de Rami sólo puede calificarse de infame, y creemos que estamos siendo demasiado generosos. Banega desaparecido (curiosamente, desde que renovó no ha hecho un partido bueno), Miguel desbordado, Aduriz aislado... Una lágrima.
El detalle: Mil valencianistas acudieron al Camp Nou a animar a su equipo. El regreso en autobús será un trago amarguísimo con el que nos solidarizamos plenamente.
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