Carlos Bosch
Un nano del Valencia lo hace bien en el primer equipo, y algunos se pasan el día buscando el problema... En cambio la cantera del Villarreal es ejemplar. ¿Dónde está la diferencia?
Arrejunto cuatro letras en mi día de regreso al mundo de los mortales después de unos gratificantes días de vacaciones, desconexión y desintoxicación. Y arrejunto también un par de ideas que calentaban mi cabeza durante unos días en los que sólo una canción gobernaba mi neurona; aquella que dice que aunque está todo mal, «tengo derecho a mi siesta»... ¿o era ´fiesta´?
Junto a mi sofá olvidaba los numerosos inputs —que diría Llorente— que, compinchados con la condenada Blackberry, trataban de echar por tierra mi felicidad; ´Carlos, no llega el defensa central´, me decía uno por el twitter de buena mañana, pero en cuanto terminaba de comer mi mente sólo escuchaba aquello de ´tengo derecho a mi siesta...´. A veces, ya tirado en el sofá, llegaba un WhatsApp de esos que preguntaba ´¿Qué va a pasar con Banega?´, y yo seguía pensando en mi canción, y no en Banega, Mangala, Nico Pareja o Spahic. Solo uno de esos ´inputs llorentinianos´ logró sacarme de mis casillas y tiene que ver con Juan Bernat. La historia se puede resumir en que un nano de la cantera del Valencia hace la pretemporada con el primer equipo y lo hace bien, —o lo hace muy bien—, pero esto que debería ser un motivo de orgullo y satisfacción que diría Juan Carlos, lo hemos convertido en un problema porque de repente alguno se dedica a averiguar quién ha apostado de verdad por el nano, mientras el otro se pone medallas cuando antes se escondía. Al tiempo, el de más allá hurga en el pasado reciente del futbolista y el que menos entiende de la película saca pecho como un palomo campeón en celo. ¿Tengo que ser yo el que diga que nadie ha salido a decir... ´¡qué buena es la cantera del Valencia´? Esto es fútbol, y un nano que un año no anda bien, la rompe al siguiente, y un nano que un año la rompe en el filial, lo mismo se acobarda en el primer equipo... ¡Aquí no valen las matemáticas! Lo que sí debería valer es que entre todos presumamos de lo que sale bien... como hacen en Vila-real, por cierto. Si ya lo decía mi neurona, ´tengo derecho a mi siesta´.
http://www.superdeporte.es/carlos-bosch/2011/08/18/derecho-siesta/136326.html
Un nano del Valencia lo hace bien en el primer equipo, y algunos se pasan el día buscando el problema... En cambio la cantera del Villarreal es ejemplar. ¿Dónde está la diferencia?
Arrejunto cuatro letras en mi día de regreso al mundo de los mortales después de unos gratificantes días de vacaciones, desconexión y desintoxicación. Y arrejunto también un par de ideas que calentaban mi cabeza durante unos días en los que sólo una canción gobernaba mi neurona; aquella que dice que aunque está todo mal, «tengo derecho a mi siesta»... ¿o era ´fiesta´?
Junto a mi sofá olvidaba los numerosos inputs —que diría Llorente— que, compinchados con la condenada Blackberry, trataban de echar por tierra mi felicidad; ´Carlos, no llega el defensa central´, me decía uno por el twitter de buena mañana, pero en cuanto terminaba de comer mi mente sólo escuchaba aquello de ´tengo derecho a mi siesta...´. A veces, ya tirado en el sofá, llegaba un WhatsApp de esos que preguntaba ´¿Qué va a pasar con Banega?´, y yo seguía pensando en mi canción, y no en Banega, Mangala, Nico Pareja o Spahic. Solo uno de esos ´inputs llorentinianos´ logró sacarme de mis casillas y tiene que ver con Juan Bernat. La historia se puede resumir en que un nano de la cantera del Valencia hace la pretemporada con el primer equipo y lo hace bien, —o lo hace muy bien—, pero esto que debería ser un motivo de orgullo y satisfacción que diría Juan Carlos, lo hemos convertido en un problema porque de repente alguno se dedica a averiguar quién ha apostado de verdad por el nano, mientras el otro se pone medallas cuando antes se escondía. Al tiempo, el de más allá hurga en el pasado reciente del futbolista y el que menos entiende de la película saca pecho como un palomo campeón en celo. ¿Tengo que ser yo el que diga que nadie ha salido a decir... ´¡qué buena es la cantera del Valencia´? Esto es fútbol, y un nano que un año no anda bien, la rompe al siguiente, y un nano que un año la rompe en el filial, lo mismo se acobarda en el primer equipo... ¡Aquí no valen las matemáticas! Lo que sí debería valer es que entre todos presumamos de lo que sale bien... como hacen en Vila-real, por cierto. Si ya lo decía mi neurona, ´tengo derecho a mi siesta´.
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