Anécdotas del valencianismo en las postrimerías del franquismo. Flamante título de Liga en la temporada 71-72. La llegada de Kempes. La alimentación a base de pan, aceite y sal. Los desplazamientos a Madrid en un autobús que había que empujar en Contreras. Los ex jugadores Guillot, Adorno y Anibal han querido compartir la mañana del martes 1 de marzo con los jubilados del Centro Municipal de la Cruz Cubierta a raíz de una iniciativa que la Asociación Futbolistas del Valencia CF ha puesto en marcha hace un mes.
El encuentro comenzó con las palabras de Fernando Giner, presidente de la Asociación Futbolistas del Valencia CF y consejero del club: “Los que hemos sido jugadores del Valencia CF queremos acercarnos a todos vosotros, y acercaros la historia del Valencia CF. Estos son jugadores que han ganado títulos y hoy están aquí con vosotros. Son jubilados como vosotros, que recogen a sus nietos y viven la misma etapa de la vida al igual que vosotros”. Acto seguido Fernando Giner hizo entrega de una placa de la Asociación a este centro de jubilados y luego fueron presentados Guillot, Adorno y Aníbal. Un vídeo de 15 minutos de la historia del Valencia CF abrió la sesión. Los jubilados del centro de la Cruz Cubierta no dudaban en comentar las imágenes como auténticos aficionados. Hablaron de los penaltis errados en la final de la Liga de Campeones en Milán, comentaron las imágenes de la mítica ‘delantera eléctrica’, cuchichearon al ver la figura de Kempes ‘El Matador’. .. todo un pasado en común.
El primero en hablar fue Anibal, jugador que estuvo siete temporadas en el Valencia CF, club con el que ganó la Liga de la temporada 70-71. “Yo nací en Paraguay en el año 45, pero mi padre era español, de Logroño. Estuve en el Valencia desde el año 68 al 75 y viví una época en la que Sol, Martínez, Ribas y Antón formaban la mítica ‘muralla blanca’, aquella defensa legendaria. Di Stéfano fue el técnico al que más tuve. Tras el Valencia CF marché una temporada al Valladolid antes de regresar a Paraguay”, comentó el veterano del club, cuya familia por parte de su esposa continúa en la ciudad.
Guillot habló durante largo con los presentes. El de Aldaia recordó su debut contra el Zaragoza en tierras mañas: “Mis inicios fueron como extremo, pero luego ya me hice interior. El sistema y las tácticas han cambiado mucho. Antes íbamos en tren y autobús, e ir a Madrid te llevaba 10 horas. El puente de Contreras era infernal, tenías que empujar el autobús. Pero había una cosa muy buena; como convivías tanto con tus compañeros debido a los largos viajes, se generaba un compañerismo que no existe ahora en las plantillas”. Guillot también habló de la alimentación: “Pan, aceite y sal muchas veces fue nuestra comida”. Todos los jubilados presentes asintieron con la cabeza. El de Aldaia, a pregunta de uno de los jubilados sobre su antiguo compañero Clemente en las filas valencianistas dijo lo siguiente: “Le dio un infarto en casa mientras veía por la tele la final de la Champions del Valencia CF contra el Real Madrid en París...”.
Finalmente Adorno, muy jovial y bromista con los presentes (“tengo 22 años”, comentó jocosamente) matizó que su llegada al Valencia CF fue una temporada después que la de Aníbal. “Tuve la suerte de compartir una de las mejores plantillas. Llegué en la 71-72 y hasta la 75-76 estuve indocumentado. El representante que me trajo a España falsificó mis papeles y tuve que ir a juicio para dejar claro que yo no participé en aquello. La amnistía por lo de Franco me salvó, eso y ser jugador del Valencia CF me ayudó mucho en todo aquel problema. De no ser por esos problemas hubiera brillado mucho más como jugador”, concluyó el ex jugador argentino. El acto fue clausurado con una firma de autógrafos de los veteranos a todos los jubilados y un sinfín de anécdotas personales que prolongaron la mañana hasta casi el mediodía fruto del ambiente tan distendido entre unos y otros.
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