¡La que se avecina! Mientras que el Valencia navega en un mar de confusión económica, social y deportiva, el presidente de la sección tercera de la Audiencia Provincial de Valencia ha convocado para las once de la mañana del viernes a todas las partes con el fin de señalar la fecha del juicio por la querella que una quincena de accionistas del club interpuso contra el ex presidente Paco Roig, pleito que luego fue ampliado contra el también ex mandatario Pedro Cortés y los ex consejeros Manuel Llorente, Vicente Pons, Jaime Molina, José López Lluch, Enrique Roig y Antonio Bonet.Trece años después del inicio de una serie de acciones contra lo que algunos valencianistas consideraron una fraudulenta adquisición de acciones en la ampliación de capital que llevó a cabo el club de Mestalla, llega el juicio en un momento crucial. Puede tardar dos, tres o cuatro meses en celebrarse, pero va a marcar mucho porque en el presente que vive la sociedad blanquinegra, la definitiva validez o no que los títulos que se adquirieron entonces es decisiva, porque podrían acabar sin valor alguno.La acusación particular tiene previsto presentar alrededor de 400 testigos -algunos, al residir en localidades muy distantes, tendrán que declarar por videoconferencia- y reclama para los ocho imputados penas que llegan hasta los seis años de cárcel.A los ocho citados les imputa un presunto delito de estafa en la creación de una red de testaferros para acaparar acciones en la ampliación de capital que llevó a cabo el club de Mestalla en marzo de 1996.Los querellantes esperaban como agua de mayo que la Audiencia fijara la fecha para el juicio penal, porque los reproches a aquel reparto vienen de muy lejos. De marzo de 1997, cuando con Paco Roig al frente del club, la Fundación del Valencia ya interpuso una demanda civil por entender que la mencionada ampliación de capital no se ajustaba a lo que se había acordado en la junta general de accionistas.Cuando meses después el Juzgado desestimó aquella demanda en primera instancia, y tiempo después, en apelación y casación los tribunales dieron la razón al club, parecía que el asunto iba a archivarse. Pero al margen de la Fundación del Valencia un grupo de accionistas acordó afrontar un procedimiento penal.En primera instancia la querella quedó archivada. La juez optó por un procedimiento abreviado y mientras que la acusación reclamó la vista, el fiscal pidió su archivo. Sin embargo, la argumentación del letrado que representa al grupo de accionistas querellante provocó que la Audiencia Provincial observase indicios para abrir un juicio penal y el viernes se sabrá cuándo se celebra.
PUES COMO NO HABIA LIO.......MAS TOMATE



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