El VCF no da salida a los jugadores con los que no cuenta, lo que dificulta sus planes para fichar un central y un lateral.
C. BOSCH / D. RODRÍGUEZ Renan Brito (2012), Miguel Brito (2012), Asier del Horno (2012), David Navarro (2012), Michel (2013), Manuel Fernandes (2013), Nacho González (2012), Maduro (2012), Aarón (2012) y Sunny Sunday (2012). Son los once futbolistas profesionales que pertenecen al Valencia y con los que el Valencia no cuentan. Con ellos, todos juntos, hasta se podría hacer un equipo de fútbol que posiblemente competiría en Primera División. Ellos —cierto que unos más que otros— representan el problema del Valencia a efectos de planificación deportiva, es lo de ´para poder entrar, dejen salir´.
Estos once futbolistas, sumados a los veinte que ya tiene en nómina, más el defensa central que se quiere contratar y al que habría que añadir un lateral derecho porque Miguel ya está en el grupo de los descartados, suman un total de 33, que a efectos deportivos y a efectos económicos son demasiados —han salidoVicente y César que terminaban contrato, Joaquín traspasado y Moyà cedido—. De hecho, son tantos que de alguna manera están bloqueando la planificación del equipo para la temporada que viene. No se trata de culpar a los futbolistas —porque los contratos que tienen se los firmó el propio Valencia—, se trata de describir una realidad que dice que las altas fichas de estos futbolistas hacen muy complicado que se les encuentre equipo, porque con la crisis que vive el mundo del fútbol, nadie está dispuesto a asumir esos sueldos.
Por mucha urgencia que tengan tanto el coordinador deportivo Braulio Vázquez, como el entrenador Unai Emery en contratar otro central —uno de perfil zurdo que ayude a sacar el balón jugado desde atrás—, lo cierto es que en estos momentos es prioritario dar salida a alguno de estos jugadores, porque ello supondría un alivio para las arcas del club; al tiempo que si es complicado mantener a todos los jugadores con los que no se cuenta en plantilla, lo sensato es no hacer más contrataciones hasta que no haya más salidas. Lo cual termina siendo un sinsentido porque lo razonable es reforzar el equipo en aquellos puestos en los que consideren necesario director deportivo y entrenador.
El ejemplo más claro de esto es la situación del lateral derecho. Hasta hace apenas unas semanas era una de las prioridades a reforzar, si no la máxima prioridad dado el bajo rendimiento de Bruno —al que se ha visto con una falta de confianza casi alarmante— y los continuos problemas extradeportivos de Miguel que culminaron en un expediente del club, una multa económica y unas semanas apartado del equipo. Ahora, en pleno verano y sin competición, el Valencia se encuentra con que no encuentra equipo para estos futbolistas y asume que hasta que no salga alguno no va a fichar a nadie. Y por varios motivos. Uno, porque tampoco ha dado con el lateral derecho ideal —sigue peinando el mercado—; dos, porque, pese a todo, Miguel rindió a cierto nivel en el campo y porque se confía en la profesionalidad de Bruno, y tercero —y tal vez más importante— porque los dos terminan contrato en 2012, lo que propicia que no se arriesgue si el mercado no ayuda este verano. Si no sale ninguno, no llega ninguno. La temporada que viene los dos terminan contrato y hay todo un año para buscar dos laterales... No hay más. Un caso similar es el de Banega, que estaba fuera antes de que acabara la Liga y ahora no está tan clara su situación. Si llega una buena oferta por él se irá, si no, se queda a pesar del fichaje de Parejo.
Toca decir que la situación de todos los futbolistas no es la misma. Por ejemplo, al Chori Domínguez y a Manuel Fernandes el club ya les ha comunicado oficialmente que no se incorporarán a los entrenamientos con el resto del grupo y que ellos lo harán el día 17 de julio. Hay que tener en cuenta que los jugadores que sí cuentan comienzan a entrenar el 7 de julio y que precisamente el día 17 tienen que estar ya en Austria... Y seguro que no es una coincidencia.
A otros futbolistas como David Navarro se les busca equipo, pero su situación no es tan drástica; de hecho, cuando Unai Emery se reunió con el central del Port de Sagunt a final de esta temporada para comunicarle que se buscara equipo le dijo que si no encontraba destino, podía hacer la pretemporada y luchar por tener una oportunidad, a pesar de que se busca desesperadamente otro central
http://www.superdeporte.es/valencia/2011/06/29/atasco/132192.html
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