El luso, que volvió a vestir la camiseta de Portugal, se enfrentará hoy a sus nuevos compañeros del Valencia CF.
Antes de que la selección de Portugal cogiera el avión rumbo a Ciudad del Cabo, donde mañana se juegan una plaza para los cuartos de final del Mundial, el nuevo defensa del Valencia atendió vía telefónica a SUPER. Al otro lado se escuchaba a un futbolista feliz por haber vuelto a vestir la camiseta de Portugal en la competición más prestigiosa del planeta, pero también mostró cierta inquietud porque por primera vez se va a cruzar con sus nuevos compañeros en el Valencia, como son los casos de Marchena y Mata, si finalmente se cierra la salida de Silva al Manchester City. Eso sí, antes del partido seguirá su ritual habitual ya que no hay amigos que valgan, dejando las presentaciones protocolarias para la conclusión del duelo.
—Su presencia en la alineación titular fue una de las sorpresas de Portugal en el duelo contra Brasil, ¿se lo esperaba?
—La verdad es que me sentí muy contento por haber jugado, porque es lo que todo futbolista quiere. Pero lo más importante es que me sentí muy útil para el equipo. Soy un jugador de equipo, un futbolista al que le gusta sentir la confianza del entrenador y antes del partido la sentí en la conversación que tuvimos. Queiroz me dio un mensaje antes de salir al campo y lo cumplí.
—Y jugó en el lateral derecho, cuando habitualmente ocupa el eje central de la defensa.
—Jugar de lateral derecho no me asustó porque estoy preparado para jugar en cualquier posición de la defensa, aunque es cierto que me considero más un defensa central.
—¿Se sintió cómodo ante Brasil por la banda derecha?
—Cuando salí al campo me llevé una sorpresa, porque en los días anteriores me preparé para marcar a Robinho, pero por mi banda caía Nilmar, el delantero del Villarreal. Son jugadores distintos, futbolistas que hacen movimientos diferentes y me tuve que adaptar lo más rápido posible, porque no podía fallar. Las personas que conocemos el fútbol sabemos lo complicado que es trabajar unos días para hacer un determinado trabajo y que el día del partido intenten sorprenderte con otra cosa, aunque en algún partido te ocurre.
—Tres jugadores han ocupado el puesto de lateral derecho en los tres partidos de la primera fase; Paulo Ferreira, Miguel y usted.
—Son decisiones que toma el seleccionador y si lo ha hecho es porque consideraba que era lo mejor para el grupo. Analizando los partidos de forma individual, Queiroz ha preferido hacer cambios en cada partido en función del rival y hay que aceptarlo.
—Y a partir de ahora, ¿qué?
—Todo me fue bien, me sentí feliz aunque no ganamos y quiero seguir ayudando a la selección.
—¿Va a ser titular contra España?
—No lo sé, pero sea titular o suplente lo que quiero es ayudar a la selección y al técnico, que fue el que verdaderamente confió en mi para estar en el Mundial.
—¿No les ha dado pistas Queiroz?
—No, pero personalmente estoy preparado para jugar, pero como todos mis compañeros de selección. Sería un placer para mí jugar contra España, mi próximo destino profesional y jugar contra David Villa, que ha salido del Valencia el año en el que yo llego.
—¿Cómo esperan que se desarrolle el apasionante duelo de octavos de final? ¿Ve a la Roja favorita?
—Honestamente creo que llegamos a una fase del campeonato en la que no hay claros favoritos. Es verdad que España es la actual campeona de Europa, pero eso va a ser una presión para los jugadores españoles.
—¿Tienen más presión que ustedes?
—Nosotros estamos tranquilos porque no tenemos ningún título que defender, España tiene más que perder que nosotros en este partido. A pesar de eso, no le consideramos favorita.
—Aunque se vieron sorprendidos contra Suiza, no me puede negar que la Roja cuenta con un grupo importante.
—Sí, sí, España tiene grandes jugadores y algunos de ellos van a ser mis compañeros de equipo, como Marchena, Mata o Silva, aunque he estado leyendo que podría irse al Manchester City. En nuestra selección también hay jugadores que tienen el sueño de hacer algo importante en el Mundial y son una pesadilla para cualquier rival.
—¿Se refiere a Cristiano?
—España le conoce bien, es uno de los mejores jugadores del mundo y fue uno de los mejores de la liga.
—Va a ser la primera vez para conocer a los que van a ser sus compañeros, aunque no tendrá mucho tiempo.
—Al final del partido intentaré hablar con mis futuros compañeros, pero antes no, porque no es el momento de tener cortesías. Soy un jugador de alta competición y no de relaciones públicas.
—¿Un resultado?
—Está claro que quiero que gane Portugal, además, estoy convencido que vamos a ganar a España.
—¿Se le nota muy contento?
—Puedo decir que he vuelto a cumplir el sueño que tenía cuando era un niño, que era jugar en una fase final de un Mundial y encima ante una selección histórica como es Brasil. Hace cuatro años también participé en el Mundial de Alemania, al jugar el partido por el tercer puesto, pero tenía ganas de tener otra oportunidad.
http://www.superdeporte.es/valencia/2010/06/29/costa-hoy-saludare-valencia-final/98920.html
Antes de que la selección de Portugal cogiera el avión rumbo a Ciudad del Cabo, donde mañana se juegan una plaza para los cuartos de final del Mundial, el nuevo defensa del Valencia atendió vía telefónica a SUPER. Al otro lado se escuchaba a un futbolista feliz por haber vuelto a vestir la camiseta de Portugal en la competición más prestigiosa del planeta, pero también mostró cierta inquietud porque por primera vez se va a cruzar con sus nuevos compañeros en el Valencia, como son los casos de Marchena y Mata, si finalmente se cierra la salida de Silva al Manchester City. Eso sí, antes del partido seguirá su ritual habitual ya que no hay amigos que valgan, dejando las presentaciones protocolarias para la conclusión del duelo.—Su presencia en la alineación titular fue una de las sorpresas de Portugal en el duelo contra Brasil, ¿se lo esperaba?
—La verdad es que me sentí muy contento por haber jugado, porque es lo que todo futbolista quiere. Pero lo más importante es que me sentí muy útil para el equipo. Soy un jugador de equipo, un futbolista al que le gusta sentir la confianza del entrenador y antes del partido la sentí en la conversación que tuvimos. Queiroz me dio un mensaje antes de salir al campo y lo cumplí.
—Y jugó en el lateral derecho, cuando habitualmente ocupa el eje central de la defensa.
—Jugar de lateral derecho no me asustó porque estoy preparado para jugar en cualquier posición de la defensa, aunque es cierto que me considero más un defensa central.
—¿Se sintió cómodo ante Brasil por la banda derecha?
—Cuando salí al campo me llevé una sorpresa, porque en los días anteriores me preparé para marcar a Robinho, pero por mi banda caía Nilmar, el delantero del Villarreal. Son jugadores distintos, futbolistas que hacen movimientos diferentes y me tuve que adaptar lo más rápido posible, porque no podía fallar. Las personas que conocemos el fútbol sabemos lo complicado que es trabajar unos días para hacer un determinado trabajo y que el día del partido intenten sorprenderte con otra cosa, aunque en algún partido te ocurre.
—Tres jugadores han ocupado el puesto de lateral derecho en los tres partidos de la primera fase; Paulo Ferreira, Miguel y usted.
—Son decisiones que toma el seleccionador y si lo ha hecho es porque consideraba que era lo mejor para el grupo. Analizando los partidos de forma individual, Queiroz ha preferido hacer cambios en cada partido en función del rival y hay que aceptarlo.
—Y a partir de ahora, ¿qué?
—Todo me fue bien, me sentí feliz aunque no ganamos y quiero seguir ayudando a la selección.
—¿Va a ser titular contra España?
—No lo sé, pero sea titular o suplente lo que quiero es ayudar a la selección y al técnico, que fue el que verdaderamente confió en mi para estar en el Mundial.
—¿No les ha dado pistas Queiroz?
—No, pero personalmente estoy preparado para jugar, pero como todos mis compañeros de selección. Sería un placer para mí jugar contra España, mi próximo destino profesional y jugar contra David Villa, que ha salido del Valencia el año en el que yo llego.
—¿Cómo esperan que se desarrolle el apasionante duelo de octavos de final? ¿Ve a la Roja favorita?
—Honestamente creo que llegamos a una fase del campeonato en la que no hay claros favoritos. Es verdad que España es la actual campeona de Europa, pero eso va a ser una presión para los jugadores españoles.
—¿Tienen más presión que ustedes?
—Nosotros estamos tranquilos porque no tenemos ningún título que defender, España tiene más que perder que nosotros en este partido. A pesar de eso, no le consideramos favorita.
—Aunque se vieron sorprendidos contra Suiza, no me puede negar que la Roja cuenta con un grupo importante.
—Sí, sí, España tiene grandes jugadores y algunos de ellos van a ser mis compañeros de equipo, como Marchena, Mata o Silva, aunque he estado leyendo que podría irse al Manchester City. En nuestra selección también hay jugadores que tienen el sueño de hacer algo importante en el Mundial y son una pesadilla para cualquier rival.
—¿Se refiere a Cristiano?
—España le conoce bien, es uno de los mejores jugadores del mundo y fue uno de los mejores de la liga.
—Va a ser la primera vez para conocer a los que van a ser sus compañeros, aunque no tendrá mucho tiempo.
—Al final del partido intentaré hablar con mis futuros compañeros, pero antes no, porque no es el momento de tener cortesías. Soy un jugador de alta competición y no de relaciones públicas.
—¿Un resultado?
—Está claro que quiero que gane Portugal, además, estoy convencido que vamos a ganar a España.
—¿Se le nota muy contento?
—Puedo decir que he vuelto a cumplir el sueño que tenía cuando era un niño, que era jugar en una fase final de un Mundial y encima ante una selección histórica como es Brasil. Hace cuatro años también participé en el Mundial de Alemania, al jugar el partido por el tercer puesto, pero tenía ganas de tener otra oportunidad.
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