REDACCIÓN | VALENCIA..-
Mientras desde la Real se lanzan elogios hacia Canales a la espera de que pueda fructificar la llegada del cántabro, desde el Valencia la postura respecto a la salida del jugador se ha endurecido. Sobre todo porque cada día hay más malestar en el seno del club blanquinegro por las presiones públicas que lleva días realizando el padre y agente del futbolista.
El entrenador de la Real Sociedad, Jagoba Arrasate, se pronunciaba ayer sobre Canales. «Es un jugador que puede salir de su club y hay que estar atentos porque es un perfil de centrocampista ofensivo que nos encaja. Pero de momento no hay nada. Un fichaje depende de muchos factores, económicos y deportivos. Además, es difícil que venga alguien a dar más que los que están aquí», decía.
De momento el Valencia está a la espera de que Canales traiga una propuesta convincente. La Real dice tener una plantilla completa pero le atrae la opción de hacerse con un futbolista de la calidad del cántabro que le garantiza también el poder jugar en varias demarcaciones. Lo que pretende la Real es asegurarse que el Valencia pague una buena porción de su ficha (1,6 millones brutos) e incluir también en la operación una cláusula de compra para final de temporada.
Lo de Pabón, después de frustrarse el intento de recalar en el Betis como así quería el propio afectado, se ha reducido a que salga una propuesta que convenza económicamente al Valencia y que, por su puesto, no vaya contra la normativa de la FIFA.
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